Puede costar creer que Mary Poppins sea una película de terror. Más puede costar aún que El Resplandor sea una comedia romántica. ¿Pero no depende del cristal con que se mire? Atento a los traileres no oficiales de las películas.
Son bastante viejo los videos, pero cosas asi hay que sacarlas del recuerdo de vez en cuando para refrescar la memoria.
Para este verano el estreno más esperado. La historia en la que se basa de uno de los juegos que más horas de productividad han destruido en las oficinas de todo el mundo.
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Si hacen por terminar la película puede que hasta la vea.
Visto en No puedo creer
Esta nueva entrega se hace mucho más amena que la anterior. No deja de tener algún que otro detalle extraño, que es mejor no destripar. Esta vez, como en la primera película, el final es muy concluyente, aunque se han guardado bastante de dejar una puerta abierta a una posible secuela, que en principio es muy innecesaria. Más divertida que la segunda y cargada de acción, no necesito ver una cuarta parte.
A los que aún no han ido al cine: quedaos hasta el final del reparto. Hay una breve secuencia que amplía el final de la película.
Ojo: Si tienes previsto ver la película no sigas leyendo. Aquí se puede haber detalles que adelanten acontecimientos de la película para los que aún no la han visto: spoiler.
Timy aprende las diferencias entre cine digital y no digital de la mano de Troy McClure aprendiendo diferentes técnicas digitales para la creación de efectos comparando películas como Matrix, 300 (Trescientos) o La Guerra de la Galaxias.
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Agradecemos este documental a la cerveza Special y a Jorge Barba, Gonzalo Gago, Benjamín Parrilla, Carlos Latorre y Sergio Ruiz. Fruto de un trabajo para la universidad.
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Con cinco años a sus espaldas, ya era hora de que fuera al Warner Bros Park y ver por mi mismo lo que me habían contado. La cosa no empezó muy bien. Compramos la entrada + billete de tren cercanías. Es cierto que puedes ir al parque desde cualquier estación de cercanías, pero no nos quedó nada claro que no debía ser en el mismo tren. ASí que tomamos uno hasta Atocha, otro hasta Pinto y allí el ramal a Parque de Ocio, que aunque parece la misma línea algo descolorida en el plano, es una línea completamente diferente. Como además nos tocó "el tren de las ruedas pinchadas" entre una cosa y otra tardamos dos horas en llegar (desde que compramos las entradas). Menos mal que el resto del día se arregló. Apenas hicimos cola para entrar, aunque se nos hizo eterno. Debimos parecer adolescentes, incluso puede que más jóvenes aún. No habíamos avanzado casi nada y ya tenía fotos con Lucas. Dimos una vueltecita por Cartoon Village y no pudimos resistirnos a visitar la fabrica Acme creyendo que no nos mojaríamos. Ese fue el principio de un día divertido. Atracciones, actuaciones, más atracciones. Tuvimos suerte, apenas hicimos cola en nada, en un par de sítios. En La Sombra del Murciélago, unos diez minutos, y en el Hotel Embrujado, unos veinte minutos.
La comida del menú que tomamos no era muy buena, pero tampoco se salía demasiado de precio (catorce euros) y las tiendas no me parecieron tampoco caras: treinta euros por una cazadora vaquera de entre tiempo y veinticinco por un peluche más grande que muchos de los niños con los que me encontraba por el camino. Aunque fue un día de no parar de soltar dinero, creí que sería peor.
Es curioso que las atracciones en las que más de divertí fueron las más simples, y las más mojadas.
Cuando me hablaron de la película Ghost Rider y de qué trataba recordé que entre los comics que leía hace años me gustaba mucho uno de un esqueleto que montaba en moto. Como realmente no recordaba mucho más, me puse a buscar por Internet y ver capturas de comics de Marvel, quedándome impresionado con esos dibujos espectaculares que me han hecho comprar varios números de mutantes. La memoria juega malas pasadas (tengo reciente haber visto Memento), pero yo lo recuerdo en tomos gruesos, blanco y negro en papel no satinado. Como seguramente inunden los kioscos con reediciones de Ghost Rider puede que compre alguno. Sea como sea, la película me llama la atención. Parece exageradamente comercial, como a mi me gustan. El protagonista es Nicolas Cage, a quién curiosamente no lo agrada a la mayoría de la gente que conozco. Ahora pueden verle en llamas.
Jack Sparrow tiene una deuda de sangre con el legendario Davy Jones y estará condenado por la eternidad a una vida más allá de la muerte a su servicio si no encuentra la forma de saldar ese pacto. La boda de Will Turner y Elizabeth Swann es interrumpida al ser arrestados por haber ayudado a escapar a Jack tiempo atrás.
Por fin he podido acudir a la cita. En general la película no defrauda. Sigue la línea de la primera, con más mar y menos tierra: Aventuras, acción y toques de humor. Una película para pasar un rato divertido sin necesidad de esforzarse en sacar más de donde no hay.
Si ya la anterior película me recordaba en algunos momento a la saga Monkey Island, en ésta hay una vuelta de tuerca con Davy Jones que tiene su más o menos parecido con el viejo LeChuck.
Al que aún no haya ido al cine a verla: quédate hasta el final del reparto. Aparece una muy breve secuencia sobre la película.
Ojo: Si tienes previsto ver la película no sigas leyendo. Aquí se cuentan demasiados detalles que adelantan acontecimientos de la película para los que aún no la han visto: spoiler.
Teniendo tan reciente la lectura del comic aún, la adaptación es bastante buena. Algunos detalles, incluso de personalidades, se han cambiado, pero respeta la atmósfera y sentimiento del tebeo. La película tiene un ritmo bastante acelerado y de tensión. No se detiene en para profundizar en la visión filosófica y esperanzadora que tiene V de la anarquía, por lo que no termina de convencer al espectador de la justificación de su "terrorismo" como sí lo consiguen las viñetas. De tanto en tanto se nota la mano de los Wachowsky con efectos que recuerdan a Matrix. Al fin y al cabo, V también es un rebelde luchando contra un sistema controlador.
De la fiebre de adaptaciones de videojuegos al cine aparece la película de Silent Hill, la gran saga de Konami en survival horror.
Mi encuentro con el videojuego fue por casualidad y muy fugaz, pero hace ya bastante tiempo. Sin embargo hay momentos en la película que me lo recuerda bastante. Hay secuencias en las que las imágenes son muy similares.
Para ser una película de terror reciente no abusa de los "sustos" y, para los que no conocemos bien el juego, desconcierta bastante cuando las cosas no suceden como parecía que iba a pasar.
Independientemente de lo buena que sea la adaptación, es una película entretenida con efectos especiales discretos que nos puede recordar alguna que otra pesadilla nocturna que hayamos tenido. Se vuelve un poco pesada hacia el final con explicaciones, personalmente habría preferido que se dieran esas explicaciones de otra forma, aunque eso habría alargado la película, que ya de por sí, se la ve bastante acelerada.
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